Fin de la Ley de Acompañamiento

María Teresa Fernández de la Vega ha confirmado hoy en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros la noticia ya conocida días atrás de la supresión de la conocida como Ley de Acompañamiento a los Presupuestos Generales del Estado. Goza de la misma preferencia en la tramitación que su hermana mayor. Las leyes anuales de medidas fiscales, administrativas y del orden social ha sido en realidad un coladero que los Gobiernos del PP han utilizado para el "todo vale".

Esta Ley tan especial nació en 1992 a raiz de una famosa sentencia de nuestro Tribunal Cosntitucional que prohibió la utilización de la Ley General de Presupuestos del Estado para introducir cualquier clase de cambios legislativos. Dicha sentencia era la respuesta a un recurso de inconstitucionalidad por la utilización de la Ley de Presupuestos para establecer unos recargos en la tarifa del IRPF. Pues bien, lo que en un principio era una Ley accesoria, cuyo único fin era realizar cambios legislativos ligados al contenido de la Ley de Presupuestos se convirtió en estos últimos años en un recurso para reformas tan variopintas como de la Ley de Televisión, la Ley de Procedimiento Administrativo, la Ley de Costas o la Ley General de Telecomunicaciones. Pero aún más perversa ha sido la estrategia del Partido Popular de introducir enmiendas de calado en el Senado (de adición sobre todo), con lo cual se hurtaba el debate.

La Ley de acompañamiento se sustituirá por una similar en cuanto a contenidos que también a modo de "cajón de sastre" modifica legislación variada aunque tramitándose por el procedimiento ordinario. Decisión personal de José Luis Rodríguez Zapatero. Una prueba del talante que muchos se niegan a ver.